El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha participado en la Cumbre de la OIT abogando por una respuesta multilateral al covid-19

En la cumbre que organiza la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre el covid-19 y sus efectos, ha sido el turno de intervención de España. Dicha cumbre está teniendo lugar en los primeros días de julio y, por parte de la USO, participa el secretario de Acción Internacional y Desarrollo Sostenible, Javier de Vicente. El encuentro pretende ser un mosaico global de la situación, con ponencias de alto nivel tanto de gobiernos como de empleadores y representantes de los trabajadores.

Jornada con los discursos de los líderes mundiales sobre los efectos del covid-19

La tercera jornada de la Cumbre Mundial de la OIT sobre los efectos del covid-19 ha contado con los discursos de líderes mundiales sobre la experiencia en sus países, qué medidas han ido adoptando y sus resultados. La introducción ha corrido a cargo del director general de la OIT. Guy Rider manifestó la preocupación por el avance de pandemia, que ha dirigido su epicentro hacia el oeste; siendo actualmente América el continente que está recibiendo el golpe más duro.

Rider puso de manifiesto la situación de emergencia que están abordando las Pymes, al no contar con reservas financieras para sobrevivir. Y también ha centrado su atención en la situación de los trabajadores de la economía informal: 6 de cada 10 trabajadores del mundo trabajan al margen de la legalidad, 1.600 millones de trabajadores en total.

El ingreso medio en la economía informal se contrajo en un 60% con la llegada del virus. Esto que podría suponer, desgraciadamente, que la próxima pandemia sea la del hambre. A esto hay que añadir la situación delicada en la que se encuentran sobre todo las mujeres y los jóvenes. Estos últimos podrían configurarse como la “generación del confinamiento” y encarar un mercado laboral con perspectivas muy sombrías.

La OIT propone cuatro pilares de actuación y España incide en una salida multilateral al covid

Bajo este panorama, la OIT ha solicitado a los estados miembros que actúen en torno a cuatro pilares:

  • en primer lugar, elaborando políticas fiscales y monetarias que fortalezcan la actividad económica.
  • después, apoyando a las empresas en su supervivencia a esta crisis. Sostener también los puestos de trabajo, el empleo y los ingresos a través de la protección social.
  • un tercer pilar sería fortalecer los sistemas sanitarios e incrementar la protección de sus trabajadores.
  • y, por último, encarar la reconstrucción a través del diálogo social.

Sobre la concertación de todos los agentes sociales y el diálogo social, ha hablado en su intervención el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez. Sánchez ha puesto el acento en una salida a esta crisis a través de fomentar un mercado laboral justo, que proteja a los migrantes y se provea de solidaridad intergeneracional.

Para el presidente del Gobierno, la respuesta debe ser multilateral y los países deben apoyarse entre sí. Un discurso que ha coincidido con el de sus homólogos en los países del sur de Europa: António Costa, de Portugal, y Giuseppe Conte, de Italia, inciden en la importancia de la solidaridad para no dejar a ningún país atrás.

USO recuerda que el diálogo social que pide la OIT no es una herramienta plural en España

Desde USO, consideramos positivo este reconocimiento a la necesidad de fomentar un mercado laboral justo para salir de esta crisis. Pero nuestro sindicato recuerda que el verdadero diálogo social es el que está abierto a la pluralidad de las organizaciones que representan a los trabajadores.

En estos momentos cruciales, en el que el futuro de millones de personas está en juego, es necesario contar con todos los agentes sociales y empujar hacia una salida inclusiva, que proteja los derechos laborales. Sobre esto último, y en particular sobre la puesta en práctica de la Declaración del Centenario de la OIT para el Futuro del Trabajo, reflexionarán en el último día de la Cumbre los ministros, y dirigentes de los trabajadores y de los empleadores de los estados miembros.